La industria turística española descarta que haya actividad en Semana Santa para garantizar una buena temporada de verano y un «salvavidas» para la industria.
En una entrevista el viernes, el vicepresidente ejecutivo de la alianza Exceltur por la excelencia turística, José Luis Zoreda, dijo que para que haya un verano con «condiciones adecuadas», los programas de vacunación deben acelerarse, un certificado sanitario europeo debe aprobarse, ERTE debe ampliarse, y debe haber más ayudas directas e indirectas.
Zoreda observó que las decisiones gubernamentales, necesarias por razones de salud, hacen inviable una apertura en Semana Santa. «No podemos perder el verano, y si estas son las medidas más adecuadas para garantizarlo, no tenemos mejores criterios para decir lo contrario». Las decisiones de mantener el cierre de los perímetros de las regiones, agregó, no envían una señal de «no visitarnos». Más bien, los mercados turísticos extranjeros pueden confiar en que la situación habrá mejorado para el verano.
Destacó que existe una demanda turística reprimida en los principales mercados exteriores pero que las reservas aún están sujetas a posibles precauciones. La recuperación, sugirió, es probable que sea «desigual», por lo que argumentó que debe haber «confianza en la salud», con niveles de inmunidad colectiva suficientes para eliminar las incertidumbres y facilitar la movilidad que satisfaga la demanda reprimida.
Reiteró la necesidad de ayudas específicas para la industria turística , señalando que ha habido empresas que no han podido facturar desde hace casi doce meses. «En la industria del turismo, cada asiento de avión que no se vende y cada cama de hotel que no se reserva se pierde para siempre». Otros sectores pueden «almacenar» la producción y vender más tarde. Este no es el caso del turismo.