La Policía Municipal monitorizará los puntos calientes del narcotráfico y otras actividades delictivas asentadas en la Colonia Marconi con 23 cámaras de vigilancia, ha anunciado este miércoles el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, en el Debate sobre el Estado de la Ciudad. Este sistema de seguridad lo compondrán dispositivos de grabación fijos de alta definición y de corto y largo alcance con los que el Ayuntamiento de Madrid espera «mejorar la convivencia vecinal en la zona y contribuir a la disminución de incidentes».
Con esta actuación, el Gobierno local da respuesta a una «reivindicación largamente solicitada por los vecinos del entorno y de las industrias ahí situadas», ha explicado el regidor madrileño. No obstante, las cámaras no entrarán en funcionamiento de forma inmediata. Se incluirán en los próximos Presupuestos, que se aprueban a final de año, y a partir de ese momento se estima su puesta en marcha para un año después. Por tanto, se prevé que estén operativas a finales de 2022.
El proyecto, diseñado por el área de Seguridad y Emergencias que lidera Inmaculada Sanz, ya se ha completado e incluye el despliegue de la red de comunicaciones y electricidad y la conexión con el centro de control del Centro Integrado de Señales de Vídeo (Cisevi) de la Policía Municipal. Para ello, se requerirá la ejecución de una obra civil para desplegar las canalizaciones y arquetas necesarias. El presupuesto total de la intervención asciende a 1,1 millones de euros.
Asimismo, Almeida ha avanzado que se reforzará la presencia de cámaras en otros puntos de la ciudad que ya cuentan con ellas. En concreto, se ampliarán las existentes en Antón Martín y en las zonas adyacentes a la Puerta del Sol. También se está trabajando en la prometida videovigilancia en el barrio de Chueca. Según fuentes consistoriales, están realizando el estudio del proyecto inicial para sacarlo a licitación antes de que concluya 2021.
Estas cámaras se unirán a las 19 que graban desde marzo en Bellas Vistas (Tetuán) y 35 en Monte Igueldo, San Diego y Monte Perdido (Puente de Vallecas) con fines disuasorios en la posible comisión de delitos. Además, en los últimos meses se han renovado las ubicadas en Lavapiés y Montera, cambiándolas por dispositivos con mejor calidad de imagen.
Con información de MadridDiario |
