Caos por el agua en Madrid, cientos de coches atrapados en un parking y la M-30 cortada por una inundación de cuatro metros de altura.
El reventón de una tubería en la glorieta de Marqués de Vadillo y las lluvias que están cayendo desde la mañana de este jueves en Madrid han desatado el caos en la zona sur de la almendra central. La M-30 ha tenido que ser cortada por las inundaciones sufridas en los tramos subterráneos y ha provocado auténtico caos circulatorio en la zona. Se calcula que se han vertido al rededor de seis millones de litros de agua.
También se han visto afectados vecinos y comerciantes, cuyos garajes y negocios yacen encharcados. Los bomberos continúan achicando el agua y esperan restablecer el tráfico lo antes posible. Pero tardarán al menos dos semanas en reparar la tubería, de 50 centímetros de diámetro, según han señalado los técnicos del Canal.
La incidencia, producida a las 2.24 horas de la madrugada. Ha ocasionado además un enorme socavón y cientos de coches se encuentran atrapados e inundados en un parking cercano. Son casi 300 los vehículos retenidos en este momento en el aparcamiento subterráneo en la calle Antonio López, 15. Especialmente afectados son los situados en la cuarta planta, ya que el nivel del agua llega a la puerta de los vehículos.
Alrededor de 50 propietarios han podido acudir al parking afectado y comprobar si sus coches podrían «salvarse» de los daños ocasionados por la inundación. «No nos ha avisado nuestra administración, al ver las noticias he bajado a ver que me encontraba y ha sido un caos total. No se puede acceder a los coches y el agua llega hasta las rodillas», relata David, propietario de una de las plazas de garaje de la cuarta planta.
Los dueños de los coches denuncian que a las 11.00h aún no han entrado los bomberos a rescatar los coches. Dado que todavía no han podido atender esa zona por las incidencias que se están multiplicando en otros lugares. «La única solución que me han dado por el momento es llamar a la aseguradora y dejar en la garita del parking nuestros datos«. Asegura Enrique, propietario de una de las plazas de garaje en la planta 4.
Una situación «desesperante» para los propietarios que aún no saben cuando y en qué estado podrán recuperar sus vehículos. «No se como estará nuestro coche. Nos han dicho que hay zonas de la planta donde el agua llega por la cadera, si es así el coche estará destrozado por dentro. Es angustiante no saber cuando lo sacarán de aquí», relata María, una de las afectadas.
Los accesos a Marqués de Vadillo y a la circunvalación siguen cortados desde las 2.24 horas de esta madrugada tras la rotura de la tubería. «Mañana complicada de tráfico», poco después de amanecer el delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante.
«Por la intervención de los equipos de emergencia en la glorieta de Marqués de Vadillo. Se han cortado todos los accesos a la glorieta desde las calles Antonio Leyva, Antonio López y General Ricardos, y el acceso a la M-30″. Ha informado también el Centro de Gestión de la Movilidad de Madrid. Mientras tanto. Un centenar de bomberos trabajaba para «achicar el agua», según ha informado la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís.
También se ha visto afectado durante la mañana el túnel baipás en el sentido A-3 y el tráfico se ha desviado por el Nudo Sur, ha detallado el centro dependiente del Ayuntamiento de Madrid. El agua en la M-30, según fuentes policiales, alcanza dentro del subterráneo de la circunvalación los cuatro metros y medio de altura.
Tras los intensos trabajos de los operarios, a las 13.00 horas se ha podido reabrir el baipás sur. A través de las redes sociales, el Centro de Gestión de Movilidad de Madrid ha indicado que permanecen los cortes en Marqués de Vadillo hacia M-30 y glorieta Pirámides. Así como los accesos a la glorieta desde Antonio Leyva y Antonio López.
Conforme ha ido amaneciendo, las redes sociales han empezado a recoger mensajes sobre esta incidencia que ha provocado inundaciones también en bajos de esta zona próxima al río Manzanares y se trabajaba para que el colegio público Concepción Arenal pudiera abrir con normalidad este jueves. Metro de Madrid y la estación de Marqués de Vadillo que pertenece a la línea 5, sin embargo, han abierto y estaban operativos al completo.
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«La situación va ser difícil durante todo el día. Aparte de la tubería tenemos otras incidencias en Madrid«. Ha explicado la vicealcaldesa. «Es probable que podamos ir abriendo algunas zonas, pero es difícil predecirlo. Los comerciantes nos indican daños en los comercios y funcionamiento anormal».
«Vi todo inundado y lleno de barro»
Al pasar por la calle Antonio López se puede observar como los dueños y empleados de los negocios de la zona trabajan incansablemente para desalojar el agua que ha invadido sus locales. Muchos de ellos no podrán abrir sus negocios en todo el día de hoy y prevén perdidas sustanciales. Mónica Fernández es la dueña de una tienda de fragancias y al llegar a su negocio se ha encontrado con todo el suelo y los muebles cubiertos de agua y tierra.
«Al abrir vi todo inundado y lleno de barro, el agua ha llegado hasta el almacén. El suelo al ser tarima está afectado y el mobiliario, al ser de madera, también. No puedo encender los ordenadores ni nada, las regletas están empapadas, los cables y las paredes, si lo enciendo puede ser muy peligroso», comenta Mónica Fernández.
Al llegar a la tienda hemos visto cómo el agua salía por debajo de la puerta. El barro está por todas partes
Cerca del establecimiento se encuentra el restaurante Melgar. Los empleados llevan toda la mañana achicando el agua e intentando limpiar el barro que ha arrasado con todo a su paso. «Este restaurante tiene dos salones y ambos están llenos de agua. Todas las sillas, mesas y demás mobiliario están manchados y probablemente por culpa de la humedad habrá pérdidas». Comenta uno de los encargados del restaurante.
Otro de los establecimientos afectados por la rotura de la tubería es BIB, una tienda de ropa y artículos variados situada al comienzo de la calle Antonio López. La tienda de grandes dimensiones amanecía cubierta de agua empapando todos los artículos textiles y llegando hasta los almacenes del establecimiento. «Al llegar hemos visto como el agua salía por debajo de la puerta.
El agua embarrada está por todas partes, llevamos horas limpiando y parece que no avanzamos. Ahora mismo no podemos saber las pérdidas, pero serán muchas ya que el agua ha llegado hasta el final de la tienda. No vamos a poder abrir hasta mañana«, relataba Natalia, dueña del establecimiento.
Los vecinos de la zona también son los grandes afectados. Muchos de ellos se enteraron del suceso por el movimiento de los servicios de emergencia. «Me desperté por el ruido de los Bomberos y de la Policía. No sabía lo que estaba pasando y al asomarme por la ventana pude ver el caos», comenta Sol, vecina de la zona.
Los residentes vieron cómo el agua entraba a sus portales pero no podían hacer nada hasta que la situación no estuviera controlada. «El portal estaba lleno de agua, llegaba hasta la escalera. Desde luego ahora no podemos ver si hay daños graves. Entre el portero y los vecinos que hemos salido a ayudar estamos intentando limpiar todo», comenta Mariano, vecino de Marqués de Vadillo.
Con información de 20 minutos
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