La Policía Municipal tuvo que afanarse durante el fin de semana en disolver las aglomeraciones producidas en el centro de Madrid.
Los agentes se vieron obligados a habilitar calles de sentido único en Preciados y el Carmen ante el elevado número de viandantes congregados en la Puerta del Sol y zonas aledañas y se han desatado las críticas contra la escasa efectividad del dispositivo especial de seguridad que se estrenó el viernes. Pese a ello, el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha defendido que la situación estuvo «controlada».
«Entiendo que el plan de seguridad funcionó porque se pudo controlar el aforo en Sol», ha justificado este lunes el regidor madrileño en la presentación del proyecto de reurbanización de la zona de Joaquín Costa. El primer edil ha recordado que esta afluencia masiva de personas ha coincidido con el Black Friday y la inauguración del alumbrado navideño, que habrían actuado como efecto llamada. En todo caso, considera que el operativo «está perfectamente planificado para acometer cualquier eventualidad en el aforo».
Por ello, lejos de alentar a los vecinos a que no frecuenten esta zona concurrida, Almeida no ha desaconsejado estas visitas: «Mi recomendación no va a ser que no vayan al Centro, que ha sido el distrito más castigado por la pandemia con diferencia», ha trasladado. «Disfrutemos de Madrid, pero con todas las precauciones», ha indicado.
Por su parte, la Policía de Madrid ha hecho público un vídeo con el cual pretende demostrar que la aparente muchedumbre concentrada en las principales arterias de la ciudad se reduce a una cuestión de perspectiva. Apoyados por las imágenes tomadas por los drones, sostienen que la circulación fue «fluida» y que se cumplió con el distanciamiento social.
