Bebes recién llegados al mundo por gestación, varados en un hotel en el país ucraniano, no están ni en un orfanato, ni mucho menos en hospital, si no en el cuarto de un hotel.
Dados a luz por mamás que gestan los pequeños para otros padres en el Centro de Reproducción Humana BioTexCom de la capital ucraniana. Todos estos seres de luz tienen a sus padres en otros continentes.
Asimismo, las estrictas medidas de aislamiento que han sido aplicadas en gran parte del mundo han dejado a diversos infantes en Ucrania sin la atención parental que habrían tenido si la crisis de la pandemia nunca hubiera pasado.
«Alcanzamos a esta situación porque nuestras fronteras están cerradas y el ministro (ucraniano) de Relaciones Exteriores dispuso no permitirle la entrada a extranjeros a Ucrania, ni por lo menos a los que tienen un bebé nacido aquí», dijo la BBC Denis Herman, abogado del centro clínico.
Además, el centro del calamidad es el hotel Venice de la capital de Ucrania, en donde se hallan varados, sin sus padres biológicos, 35 recién nacidos de un total de 100 repartidos en diferentes partes de Ucrania, explica desde Kiev Zhanna Bezpiatchuk, periodista del servicio ucraniano de la BBC.
«Para abreviar, la gente en Ucrania está en shock. Es insólito ver a un montón de angelitos acumulados en un hotel y no en una clínica. Muchos se preguntan, ¿por qué está pasando esto? ¿Dónde están los padres de estas criaturas?».
«Mucha gente ve las imágenes y dice sorprendida: ‘Parece una fábrica de bebés», expresó Bezpiatchuk.