Las protestas en Minsk, Bielorrusia, contra los resultados de las elecciones presidenciales del 9 de agosto, en las cuales ganó el actual mandatario Alexánder Lukashenko, que está en el poder desde 1994, no han cesado.
Este miércoles, algunos manifestantes sostuvieron flores en sus manos como símbolo de no agresión. De nuevo, por todas partes se escucha el sonido de bocinas de coches, cuyos conductores expresan así su solidaridad con los manifestantes, reportan los corresponsales de TASS.
De momento no hay informes de enfrentamientos graves entre los manifestantes y la Policía, que marcaron los tres días anteriores de protestas. Además, se informa que esta noche a las calles de Minsk salieron menos personas que antes.
Por otra parte, la Policía bielorrusa detuvo este miércoles a dos personas que prepararon cócteles Molotov para «utilizarlos durante los actos públicos contra los agentes», según informó la portavoz del Ministerio del Interior del país, Olga Chemodánova.