El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha informado este martes de que se están notando daños estructurales en la economía y ha exigido no verificar una retirada prematura de los estímulos fiscales, sino ampliar transitoriamente y recalibrar algunas medidas ya afiliados, como los ERTE por sectores o poder afirmar la liquidez a las empresas mediante los conjuntos de garantía pública luego de que se extingan los avales del ICO, como para trasladar la directiva europea sobre reestructuración e insolvencia para así establecer ordenamientos agiles.
Además, apuesta por establecer una habilidad a medio plazo de afirmación fiscal, una vez que se pueda rescatar el aumento mantenido, así como una agenda de reformas estructurales ansiosas, en la cual pase por implantar formas como convenciones de despidos progresivos, la mochila austriaca o un estudio del procedimiento educativo.
Asimismo, Hernández de Cos igualmente ha obligado acometer la reforma del sistema de préstamo autonómica para ajustar los ingresos a las valoraciones objetivas de necesidades de consumo, y así avalar un repartimiento transparente y poder aumentar el grado de corresponsabilidad fiscal, para lo que ha pedido consenso.