A pesar de la crisis política y social que afronta su país, el Congreso de Perú impidió este domingo avanzar en destrabar la situación al negar la elección de la legisladora izquierdista Rocío Silva Santisteban como la que hubiera sido primera presidenta en la historia del país.
Silva encabezó una lista que, en principio, se anunciaba de consenso para asumir la presidencia del Legislativo y, de esa manera, sustituir en la jefatura del Estado a Manuel Merino, quien renunció a ambas funciones en medio de la crisis generada desde el pasado lunes, cuando se destituyó a Martín Vizcarra.
Ante el rechazo a esta propuesta de mesa directiva, las nueve bancadas del parlamento deberán negociar para formar otra lista de consenso. Esto es urgente porque la renuncia que presentó Merino a la jefatura de Estado ya fue aceptada por el Legislativo, lo que hace que Perú actualmente carezca de Gobierno.
La medida del Congreso generó de inmediato el rechazo de una multitud de personas que se encuentran a las afueras del Palacio Legislativo a la espera de una solución constitucional a la crisis que afronta Perú.
Analistas y periodistas criticaron al Parlamento por mantenerse nuevamente ajenos a las exigencias de la ciudadanía, ya que el pasado lunes también destituyó a Vizcarra a pesar de la opinión mayoritaria en contra de los peruanos, lo que desató la crisis política y social en el país.
La ciudadanía rechazó la posterior toma de mando de Merino, quien era presidente del Congreso, con marchas multitudinarias que fueron duramente reprimidas por la policía en Lima y este sábado dejaron dos muertos y decenas de heridos.