Tras seis horas de debate protagonizadas por Vox y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el Congreso ha dado paso a los portavoces de todas las formaciones para que fijen sus posiciones ante la moción de censura. En orden de menor a mayor representación en la Cámara baja, los partidos han tomado la palabra, y el rechazo a la iniciativa de Santiago Abascal ha resonado en el Hemiciclo. La moción de censura fracasará ya que, salvo sorpresa de última hora, solo logrará el voto favorables de los 52 diputados de la formación de extrema derecha.
El primero en intervenir ha sido el diputado de Foro Asturias, Isidro Martínez Oblanca, que ha afirmado que no apoyarán a otro candidato a la Presidencia del Gobierno que no sea el líder del PP, Pablo Casado, con quien mantienen una alianza. Oblanca ha asegurado que comparte «el diagnóstico de Vox sobre la pésima gestión del Gobierno, los ataques a la Constitución y a la Corona, el desprecio a la independencia judicial y el desplome de la economía al que nos ha llevado este multigobierno», pero ha defendido que el «mejor candidato» es el dirigente ‘popular’.
El diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, ha avanzado que votará ‘no’ a la moción ya que «nuestro diagnóstico de la situación de España y la realidad de los ciudadanos no se corresponde en ninguno de los extremos con la sociedad que han presentado ustedes», y ha reclamado que se ponga fin a «la confrontacion estéril» que padece la política española.
El portavoz del PRC, José María Mazón, ha denunciado que Vox «no escucha la calle y nos hace perder el tiempo» con una moción que no logrará ser aprobada, cuando «se retrasa el trabajo que tenemos pendiente». Mazón ha criticado que Abascal e Ignacio Garriga «hoy han repetido lo mismo de siempre, no han dicho nada nuevo, y si los diputados estamos cansados de escucharlo, imagínese los ciudadanos». El representante del Partido Regionalista de Cantabria ha denunciado el «uso torticero de la Constitución» por parte de Vox, ya que «son el 15% de la Cámara y no tienen ni un solo aliado, están totalmente solos y esto es perder el tiempo y es una provocacion más».
El representante de UPN, Carlos García Adanero ha recordado que «estamos los mismos diputados que en Enero, esto no ha cambiado» y ha subrayado que «no se puede decir que los que votamos ‘no’ a la moción es porque estamos a favor de Sánchez o vamos de la mano de los de Bildu», confirmando su voto en contra. «Esto es moción de censura, no una cuestión de confianza; y una moción debe tener un candidato alternativo y un programa. Nosotros tenemos un acuerdo con el PP y con Ciudadanos y nuestros candidatos son Pablo Casado o Inés Arrimadas, así de claro». García Adanero ha defendido que «nosotros somos regionalistas, no somos centralistas y defendemos el estado autonómico, que con sus defectos ha sido fundamental para el desarrollo de España», en alusión al «centralismo» que plantea Vox.
El diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo ha tachado de «fascistas y totalitarios» a los dirigentes de Vox, que «parece que consideran razonables los golpes de Estado, por lo que uno llega a pensar que si pudiesen, darían un golpe». Quevedo ha criticado el lenguaje «guerracivilista y protogolpista» de la extrema derecha, al tiempo que ha censurado que hablen de «pandemia china» para referirse al coronavirus, por lo que se ha preguntado si «declararán la guerra a China si llegan al poder», por lo que ha anunciado un «no con mayúsculas» en la votación.
La portavoz de Coalición Canaria, Ana Oramas, ha denunciado que «la política se ha convetido en algo inútil, y que hoy estamos gastando dinero de los españoles en un debate que no lleva a nada y lo peor es que todos lo sabemos». Oramas ha confirmado su rechazo a la moción, y ha criticado que «hemos convertido el país en una tierra de fanáticos». Oramas ha tildado de «puro teatro» el debate y ha insisitido en que «nuestro país se enfrenta a gravísimos problemas, mientras los políticos hemos alejado y crispado a los españoles». A su juicio, «la verdadera moción de censura se la pondrán a Sánchez las miles de familias que pierden sus ahorros y la esperanza mientras nosotros seguimos aquí ciegos y sordos; le estamos fallando a España».
El diputado de la CUP, Albert Botrán, ha manifestado su ‘no’ a la moción y ha afirmado que «hoy se presenta un golpe de Estado en forma de moción de censura», al tiempo que ha citado textualmente a Antonio Tejero, para afirmar que Abascal ha utilizado «el mismo hilo argumental que Tejero cuando defendió su golpe de Estado el 23-F». Botrán ha concluido su intervención con unas palabras en catalán: «Cataluña es y será antifascista; no pasarán».