El Rey Felipe VI ha presidido la ceremonia de Estado en memoria de las víctimas de la pandemia de Covid-19 subrayando que «el mejor homenaje renovado» que se les puede rendir es «la determinación frente a la adversidad y el espíritu de superación del pueblo español», que «muestran el camino a seguir para afrontar y vencer las dificultades».
«Hemos contraído una obligación moral y un deber cívico», ha dicho el jefe del Estado. «La obligación moral de reconocer, respetar y recordar siempre la dignidad de los fallecidos y especialmente el espíritu de esa generación admirable de españoles; y el deber cívico de preservar e impulsar los mejores valores que fundamentan nuestra convivencia», ha afirmado.
Y ha añadido que esas obligaciones comprometen a todos los españoles. Por eso, los ha llamado a unir todo su esfuerzo y empeño «para poder mirar hacia el futuro con confianza y con esperanza» y a hacerlo «desde el respeto y el entendimiento».