España aliviará sus restricciones a la libertad de expresión, dijo el martes el gobierno, en respuesta al furor nacional por la orden de encarcelamiento de un rapero por una canción y tuits.
Un cambio en la ley no evitaría por sí solo el encarcelamiento de Pablo Hasel, a quien se ha ordenado que se entregue a fines de esta semana para cumplir una pena de prisión de nueve meses impuesta en 2018 en virtud de una ley de seguridad conocida en España como la “mordaza”. ley». Ha dicho que no se entregará.
Según la ley de 2015, las letras y los tuits de Hasel, que incluían referencias a grupos guerrilleros prohibidos, compararon un tribunal con los nazis y calificaron al ex rey Juan Carlos de capo de la mafia, fomentaron la violencia e insultaron a la monarquía.
Más de 200 artistas, entre ellos el director de cine Pedro Almodóvar, el actor Javier Bardem y el cantante Joan Manuel Serrat, han firmado una petición contra el encarcelamiento de Hasel, pidiendo que se cambie la ley. Los partidarios de Hasel han demostrado exigir que no sea encarcelado.
La portavoz del gobierno, María Jesús Montero, dijo que en respuesta al caso Hasel, el gobierno había “expresado su voluntad de brindar un marco mucho más seguro para la libertad de expresión”. La reforma estaba en sus primeras etapas, dijo.
En un comunicado, el gobierno de coalición de izquierdas dijo que la reforma introduciría penas más leves en lugar de prisión, y se enfocaría únicamente en acciones que “claramente impliquen la creación de un riesgo para el orden público o provoquen algún tipo de conducta violenta”.
Hasel, conocido por sus puntos de vista de izquierda radical y cuyo nombre real es Pablo Rivadulla, dijo en un tuit que el gobierno no estaba haciendo nada para evitar su encarcelamiento.
“Con declaraciones vacías como tantas otras falsas promesas, quieren extinguir la solidaridad”, escribió.
La ley de 2015 fue promulgada por un gobierno de derecha anterior, que dijo que era necesaria para evitar la glorificación de grupos armados prohibidos como los separatistas vascos ETA. Prohíbe el discurso no solo para glorificar la violencia, sino también para insultar a las religiones o la monarquía.
Los opositores dicen que se ha aplicado de manera demasiado restrictiva, imponiendo sanciones penales a las críticas legítimas al estado. Amnistía Internacional dice que alrededor de 70 personas fueron condenadas por ley en 2018 y 2019.
Otro rapero huyó a Bélgica en 2018 después de ser sentenciado a tres años y medio de prisión por cargos que incluyen insultar a la monarquía y elogiar a grupos terroristas.
La petición de los artistas comparó a España con países como Turquía o Marruecos, donde los artistas han sido encarcelados.
“El encarcelamiento de Pablo Hasel hace aún más evidente la Espada de Damocles colgando sobre la cabeza de todos los personajes públicos que se atreven a criticar públicamente la actuación de cualquiera de las instituciones estatales”, dijo.
