Continúa el desencuentro total entre el Gobierno central y el Ejecutivo madrileño a costa del estado de alarma en Madrid y otras 8 ciudades de la región, que se decretó el pasado viernes.
Antes de la reunión del grupo Covid, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, han arremetido duramente contra el ministro de Sanidad y han acusado al Gobierno de «secuestrar» a los madrileños con el estado de alarma, que han exigido que decaiga. Y justo después, el titular de Sanidad, Salvador Illa, ha respondido que «con la salud pública no se negocia» y ha reiterado que el estado de alarma se mantendrá durante 14 días, tal y como fue aprobado por el Consejo de Ministros.
Aunque el Gobierno madrileño admite que no cumple los tres criterios fijados por Sanidad, insiste en el descenso de la incidencia acumulada, mientras sigue superando los umbrales en el caso de ocupación de camas UCI y positividad en las pruebas PCR. En una comparecencia conjunta, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida han acusado al ministro de Sanidad, Salvador Illa de «inventarse un cambio de reglas» para mantener el estado de alarma, y han llegado a afirmar que el Ejecutivo «secuestra» a los madrileños, que son «rehenes de batallas políticas».
Ayuso y Almeida han cargado contra el criterio «inventado» por el ministro Salvador Illa esta mañana por el cual fija en «200 o idealmente menos de 100» la «perspectiva» de positivos que debería darse en la autonomía para retirar las restricciones a la movilidad.
Tras la comparecencia de Ayuso y Almeida, se ha producido la del ministro de Sanidad y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón para analizar la evolución de la epidemia en nuestro país.
Salvador Illa ha negado haberse inventado «un cambio de reglas» respecto a los criterios que debe cumplir Madrid, y ha reiterado que el estado de alarma se aprobó con una duración de 14 días, por lo que no se levantará antes de ese plazo.
«Lo único que nos importa es la salud y con la salud pública no se negocia. He oído argumentos frente a la izquierda y de derechas pero no argumentos sanitarios. Podemos cruzarnos de brazos o ganarle al virus, y el objetivo del Gobierno es ganarle al virus aunque suponga sacrificios».Así ha comenzado su intervención el ministro de Sanidad.
Illa ha reiterado que el umbral de 200 casos por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas, fijado por el Centro Europeo de Detección y Control de Enfermedades para tomar medidas drásticas es el que ha mantenido el Ejecutivo. «Todos sabemos que hay que actuar a partir de 60 casos y hay que tomar medidas drásticas a partir de 200».
El ministro ha insistido en que el umbral de 500 que se fijó para Madrid «era el último límite», y ha puesto como ejemplo comunidades como Navarra, Cataluña o Andalucía, que están tomando medidas al tiempo que ha valorado muy positivamente que Asturias actúe con una incidencia de 175 casos. «El objetivo no es bajar de 500 sino bajar a ratios de en torno a 100 casos por cada 100.000 habitantes porque esa cifra nos permite un amrgen de reacción», ha afirmado Illa.
