El ‘preacuerdo’ entre la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Sanidad ha saltado por los aires, después de que el Gobierno madrileño haya reclamado criterios «objetivos y claros» para aplicar restricciones, al tiempo que ha rechazado extender las medidas a toda la capital. Los indicadores que parecían aceptados por ambas adminstraciones no son suficientes ahora para el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha trasladado su desacuerdo con los criterios del Ministerio de Sanidad, según los cuales deberían imponerse restricciones en las 10 ciudades de la región con más de 100.000 habitantes. La Comunidad de Madrid ha reclamado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud «criterios objetivos y claros para todas las Comunidades Autónomas», pero que no se ciñan solo a los tres indicadores conocidos en las últimas horas.
Según Sanidad, deben aplicarse restricciones en aquellas ciudades a partir de 100.000 habitantes, cuando presenten una incidencia acumulada de contagios en las últimas dos semanas de más de 500 positivos, así como una tasa de positividad igual o superior al 10% en las pruebas PCR y cuyo porcentaje de ocupación de camas de UCI sea superior al 35% en la zona de salud.
La posición del Ejecutivo madrileño vuelve a suponer un nuevo choque con el Ministerio de Sanidad, que ha reunido a todas las comunidades autónomas para abordar un borrador que incluye los indicadores que deben considerarse en la toma de medidas para controlar la transmisión del coronavirus.
El Gobierno de Ayuso reclama más «criterios técnicos y científicos claros» así como «seguridad jurídica» para la aplicación de medidas restrictivas, tal y como señalan en un comunicado emitido esta tarde.
Madrid ha pedido a Sanidad que justifique la «la base científica y técnica que avala el nuevo criterio de los 500 contagios por cada 100.000 habitantes», frente al de 1.000 positivos por cada 100.000, que plantea la consejería de la región.