El lunes ha despertado con la buena noticia del rescate a tres kilómetros de la costa de Barcelona de una mujer que estuvo 6 horas en el mar. Al entrar a nadar a las 20 horas del pasado domingo en la playa de Sant Miquel de la Barceloneta y no poder salir al ser arrastrada por la corriente. Ha habido suerte, pero no solo eso.
La mujer era nadadora habitual, tenía buena forma física y supo mantener la calma durante las seis horas que estuvo en el mar. Que durante todo el fin de semana ha estado alterado. El pasado domingo había mar de fondo, el mismo que arrastró a la nadadora aguas adentro.
¿Cuándo comenzó todo?
La mujer entró a nadar hacia las 20 horas del pasado domingo, y a las 22 horas. Una amiga suya que se encontraban en el arenal dio aviso al teléfono de emergencias 112 de que no la habían visto salir del agua. Y que su ropa, su teléfono móvil y su perro seguían en la arena.
«Mujer bañista que hace una hora no ha vuelto a la playa de Sant Miquel», reportaban desde Salvamento Marítimo. En ese momento se inició la búsqueda y se movilizó el equipo de Salvamar, al Helicóptero de Salvamento Marítimo, a la Guardia Civil. A la Policía Portuaria, a los Bombers y a los Mossos d’Esquadra.
¿Cómo es posible que aguantara seis horas en el agua?
Ya entrada la noche, y debido a que la visibilidad era nula dentro del mar, los equipos de rescate deciden suspender la búsqueda de la mujer hasta que despunte el día. Y aquí es donde entra la suerte, ya que la corriente había arrastrado a la mujer hasta la zona donde fondean los barcos a la espera de que el Práctico les dé acceso al Port de Barcelona.
Además de este golpe del destino, la mujer tuvo la sangre fría de mantenerse tranquila. Al no caer presa del miedo, y al tomar la decisión de dejarse llevar por la corriente, propició que pudiera reservar fuerzas y no caer rendida ante la fuerza del mar. Su cabeza fría, unido a su buen estado de forma física. Hizo que cuando fue rescatada del agua solo presentara una leve hipotermia debida a las más de seis horas que llevaba dentro del agua.
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Las primeras palabras que dijo a los que la rescataron dan muestra de su tranquilidad. Dentro de una situación de extremo riesgo para su vida: «No necesito una ambulancia». No obstante, fue trasladada al cercano Hospital del Mar. Donde ha estado en observación hasta ser dada de alta este lunes a primera hora de la tarde.
¿Cómo se ha producido el rescate?
En el fondeadero, un buque «localiza a la bañista a las 4 de la pasada madrugada. Le lanza un aro salvavidas y la rescata al avistarla pidiendo socorro desde el agua. Después, fue trasbordada a la embarcación de Prácticos, que es la que la traslada hasta tierra firme. Dónde es atendida por los servicios sanitarios», han explicado este lunes fuentes de Salvamento Marítimo.
«Hemos lanzado un salvavidas a una mujer que está nadando cerca del casco». Informaron a las 4 de la madrugada desde el buque mercante que la encontró los marineros que se encontraban fondeados.
El hecho de que el barco no estuviera navegando fue providencial para que la mujer haya sido rescatada con vida. De no haber sido así, seguramente, las hélices de la embarcación hubieran absorbido mortalmente a la nadadora.
Los Prácticos, que son los encargados de supervisar las entradas y salidas del Puerto de las grandes embarcaciones. Enviaron una lancha con dos tripulantes a bordo que fueron los que la llevaron a tierra. Una ambulancia de la Policía Portuaria la trasladó hasta el Hospital del Mar.
¿Ha habido recientemente casos parecidos?
Hace un mes, en la madrugada del pasado domingo 7 de agosto. Otra mujer fue localizada sana y salva, aunque con una ligera hipotermia, en la playa de La Zurriola de San Sebastián (País Vasco). Un helicóptero de Salvamento Marítimo la avistó agarrada a unas rocas junto al paseo de Luis Pedro Peña Santiago y pidiendo auxilio.
Los socorristas de esta playa donostiarra aseguraron entonces que realmente es «difícil» que una persona que es arrastrada por el mar (en este caso el Cantábrico) de noche, sobreviva. Lo que también consiguió esta nadadora.
SOS Deiak recibió el aviso de su desaparición el sábado 6 de agosto a las 22.30 horas. Inmediatamente se movilizaron embarcaciones de Salvamento Marítimo y de Cruz Roja que buscaron por la zona en la que se creía que se podía encontrar la mujer con la ayuda de potentes focos. A la búsqueda se sumaron efectivos de la Ertzaintza. La Guardia Municipal de San Sebastián y los Bomberos así como un helicóptero de Salvamento Marítimo con base en Santander (Cantabria). Este fue el que dio con ella a las 00.40 horas.
Hace dos años se daba un caso insólito en Colombia, cuando una mujer que llevaba desaparecida desde 2018 fue localizada con vida y flotando en el mar a dos kilómetros de la costa de Puerto Colombia, en el Atlántico.
La mujer, de 46 años, y que estaba en paradero desconocido desde hacía dos años, fue hallada por un pescador. Que la encontró desorientada y con síntomas de hipotermia. Pudo haber pasado unas ocho horas en el mar.
Con información de 20 minutos
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