El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha afirmado este miércoles que la crisis que se está viviendo en este momento no destruye el diagnóstico sobre las pensiones y que el golpe en las cuentas de la Seguridad Social es de naturaleza «genuinamente transitoria» dijo. Sin embargo, pronostica un déficit de la Seguridad Social del 2% del PIB este año, siete décimas superior al del año pasado, y que extienda en el 1,4% del PIB en el año 2023 si no se efectúan medidas, como por ejemplos eliminar gastos impropios.
De esta manera, así lo ha destacado durante su asistencia a petición propia ante la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo en el Congreso para comunicar sobre la transformación de las recomendaciones sobre las pensiones, la cual ha indicado que el diagnóstico elaborado en el mes de febrero sobre las pensiones no ha cambiado con motivo de la crisis debido al Covid-19.
Además, Escrivá ha asegurado que esta evaluación no varía porque las tendencias son de medio y largo plazo y el impacto del Covid en las cuentas de la Seguridad Social es de naturaleza «genuinamente transitoria» y se está abordando en las relaciones entre el Estado y la Administración de la Seguridad Social.
En su análisis, Escrivá ha comprobado un aumento de las jubilaciones anticipadas, hasta el 16% del total en 2019, y ha solicitado a incentivar la demora en la jubilación, aumentando los incentivos económicos por retardar la jubilación y reforzar fórmulas de compatibilidad con el trabajo que permitan la prolongación de las carreras profesionales.
