Como es habitual cada 15 de mayo, Día de San Isidro, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, han asistido, junto al arzobispo de Madrid, a la ermita del Santo para cumplir con la tradicional bendición del agua del santo.
En un acto previo, el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha recordado este sábado, en la misa solemne oficiada con motivo de la festividad de San Isidro, patrón de Madrid, a las familias afectadas por el coronavirus que han perdido a sus familiares y a los ven el futuro «con incertidumbre» tras perder su trabajo.
En la homilía celebrada en la Colegiata de San Isidro, el cardenal ha pedido al patrón por las personas que han sido «tocadas» por el virus y siguen sufriendo sus consecuencias, así como por el personal sanitario. «Enciende, San Isidro, nuestro corazón de luz y esperanza», ha pedido.
«¿Por qué el pueblo de Madrid se entusiasmó con San Isidro? ¿Por qué ha definido la vida, la historia y las tradiciones de Madrid este santo? Quisiera decíroslo en pocas palabras: cuando la altura espiritual de una vida humana está marcada por el amor, los humanos entendemos que ese es el criterio decisivo para valorar positivamente o negativamente la vida. Fue el amor al otro lo que hizo de San Isidro un santo del pueblo», ha afirmado Osoro.
Asimismo, ha trasladado a los presentes que Madrid ha sido «una escuela de comunión a través de su historia». «San Isidro dejó una huella que marcó la dirección de esta gran ciudad. Aquí nadie se siente extraño. Hay diversidad de procedencias, de culturas y de tradiciones, pero todos estamos integrados en una comunidad de hermanos», ha compartido.
La misa ha contado con la presencia política del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida; la vicealcaldesa, Begoña Villacís; la presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; y los portavoces de los grupos municipales, entre otros.
Cn información de MadridDiario.