Seis meses después de que Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, decretara el estado de alarma, España ha terminado con el toque de queda impuesto para contener la pandemia. Y las calles lo celebraron. Cientos de madrileños se congregaron en diferentes puntos de la capital a las 00:00 para festejar la llegada de la libertad de movimiento en horario nocturno.
El barrio de Malasaña fue uno de los puntos donde más gente se congregó. En concreto, en torno a la plaza del Dos de Mayo, donde cientos de jóvenes, muchos de ellos sin mascarilla, bailaron, sin apenas distancia de seguridad, y gritaron consignas como «libertad» y «puto toque de queda».
Hasta ese lugar se tuvo que desplazar la Policía, que desalojó varias calles por las que no podían circular los coches por la gran cantidad de gente. Ante la llegada de los agente para dispersar a los jóvenes de las calles, la fiesta prosiguió en la plaza del Dos de Mayo. Todo ello a pesar de que en Madrid, el toque de queda estaba aun vigente este sábado entre las 23:00 y la medianoche.
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Donde también tuvieron que intervenir los agentes fue en la Puerta del Sol. Muchas personas se juntaron en el kilómetro Cero de la capital como si de la noche de fin de año se tratara. Sin campanadas, pero con mucha afluencia de gente en las calles aledañas, la Puerta del Sol celebró el fin del estado de alarma con cánticos de «libertad» y con una cuenta atrás cuando quedaban pocos segundos para la medianoche.
También, la mayoría llevaba botellas de alcohol que no trataban de ocultar. Es más, las intenciones de los asistentes eran bien sabidas, proclamadas por ellos mismos: ‘Alcohol, hemos venido a emborracharnos y el resultado nos da igual’, cantaban los asistentes.
Restricciones en Madrid
Cabe recordar que la Comunidad de Madrid, dentro de sus competencias, ha ampliado el horario de la hostelería hasta las 00:00, no pudiendo admitir nuevos clientes a partir de las 23:00. Asimismo, tras el fin del estado de alarma, Madrid ha dejado en recomendación que no se celebren reuniones de no convivientes en domicilios. Asimismo, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, afirmó este sábado que desde el Ayuntamiento pondrían todos los medios para que no se celebrasen botellones en la vía pública.
Aunque las fiestas y celebraciones se repitieron por gran parte de la geografía española, lo cierto es que se producen a pesar de que España mantiene una incidencia acumulada de cerca de 200 casos por cada 100.000 habitantes.
Con información de Telemadrid.
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