En Redon, una localidad rural de Bretaña, en el oeste de Francia, este viernes por la noche se vivieron escenas de una violencia extrema durante una «rave» ilegal, que había concentrado en el lugar a unas 1.500 personas.
La violencia estalló cuando varios escuadrones, con unos 400 gendarmes antidisturbios, llegaron al lugar para evitar que se instalaran los jóvenes y confiscar los equipos de sonido, lo que dio pie a más de siete horas de enfrentamientos durante buena parte de la noche, reseñó Euronews.
Un joven pierde una mano
Un joven, de 22 años, perdió una mano, en circunstancias que están siendo investigadas. Cinco agentes resultaron heridos. De ellos, dos fueron evacuados al hospital.
Algunos de los participantes lanzaron a los gendarmes cócteles molotov, bolas de petanca, piedras y petardos. Los agentes respondieron con gases lacrimógenos y granadas antidisturbios.
Cuando amaneció, cientos de jóvenes aún seguían en el lugar, jugando al gato y al ratón con las fuerzas del orden.
La fiesta había sido convocada a través de las redes sociales, especificando que era un homenaje a un joven muerto en 2019 al caer al río mientras huía de una intervención policial durante una «rave» ilegal en Nantes.
La pasada Nochevieja, en plena crisis sanitaria, otra «rave» ilegal concentró en esta misma zona de Bretaña a unas 2400 personas durante 36 horas.
Fuente: Euronews
