Expertas de la ONU que investigaron durante cuatro meses el envenenamiento al líder opositor ruso Alexei Navalni indicaron que las evidencias apuntan a una «probable implicación» de oficiales del Gobierno ruso, presumiblemente de alto nivel, en ese suceso, ocurrido en agosto del año pasado.
En una carta oficial enviada a las autoridades rusas en diciembre, cuyos detalles se conocieron hoy al cumplirse los dos meses de cláusula de confidencialidad, las dos investigadoras (las relatoras de la ONU Agnès Callamard e Irene Khan) indicaron que el veneno utilizado, Novichok, es una de esas evidencias.
«Los conocimientos necesarios para manejarlo y desarrollar nuevas modalidades de Novichok como la hallada en las muestras tomadas a Navalni sólo pueden encontrarse en actores estatales», destacaron las relatoras en su misiva.