El recorrido de la economía de España en la parte final del ejercicio va junto inexorablemente al progreso de la pandemia del coronavirus. De manera que, España se ha convertido en el primer país europeo con más tasa de contagios con una cifra de 136 casos por 100.000 habitantes, con más de 3.700 sólo en las últimas 24 horas.
No obstante a nivel europeo dice el vicepresidente del BCE Luis de Guindos que es optimista ante los datos de la recuperación que se va dando a conocer.
Por lo tanto, si continúan elevándose los niveles de emergencia sanitaria y las medidas de protección, con la mascarilla la cual la mayoría de los españoles se han acostumbrado, se han preguntado qué puede venir después.
Asimismo, dependiendo de la evolución del virus puede impactar de manera muy grave en la economía española, sin la esperada recuperación. Además ya hemos visto el efecto destructor del 18,5% en la derrumbe del PIB del segundo trimestre y veremos a finales de septiembre el precio de la mejora en el tercero, con el turismo internacional a menos de medio gas por los tempranos rebrotes.
Por otro parte, un efecto de segunda vuelta tras la crisis en la que ya estamos sumergidos, con el impacto en el desempleo, los ERTEs y con todas las ayudas públicas ya puestas sobre la mesa, sin olvidarnos de que los niveles de deuda están al 100% del PIB, nos deja con un escaso margen de maniobra económica.