El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido en el Congreso tal y como se estableció tras la aprobación del estado de alarma, pues se comprometió a acudir a la cámara baja cada dos meses hasta que finalice el estado de alarma para informar sobre la crisis del coronavirus y su evolución.
Las cifras de los últimos días notificadas por Sanidad preocupan dada la subida de contagios en muchos lugares del país, por lo que Sánchez se ha mostrado contundente al comentar la situación actual y el futuro de cara a las fiestas navideñas. El presidente ha señalado que «si hay que endurecer el plan de Navidad, el Gobierno lo endurecerá» y ha calificado como «preocupante» el número creciente de contagios de coronavirus de la última semana.
«Nadie está libre del repunte»
Sánchez ha enfatizado en que no se puede «bajar la guardia» y que depende de todos «no abrir la puerta de la tercera ola». Ha recordado que «nadie está libre del repunte» y ha instado a todos a sumar fuerzas en este «último esfuerzo» para no «tirarlo todo por la borda».
El presidente del Ejecutivo ha advertido en la cámara que todavía quedan meses «duros» por delante y ha apelado a una Navidad «en casa» y limitando a l máximo los movimientos y la interacción social. Ha pedido a todos que salgan «solo para lo imprescindible» y asegura que el mejor regalo para estas Navidades es la «seguridad». Además, ha avisado que es en el periodo navideño cuando se va a «definir» si España evita, o no, la tercera ola del coronavirus.