Los trabajadores de la Funeraria Municipal de la Comunidad de Madrid han celebrado este martes una jornada de huelga para exigir al Ayuntamiento de Madrid un plan de contingencia que incluya “personal y medios” para hacer frente a la crisis sanitaria sobrevenida por el Covid-19.
Parte de la plantilla se ha concentrado esta mañana frente al Palacio de Cibeles a la misma hora que daba inicio el Pleno, que incluye una moción de urgencia para aprobar una declaración institucional de reconocimiento a los empleados por el “excepcional trabajo realizado durante la pandemia”.
Rufino Ramos, secretario general de CCOO de la Funeraria de Madrid, ha manifestado que pretenden que el Consistorio adopte medidas tendentes a “corregir los errores que se cometieron en la primera fase de la pandemia”, así como que se priorice la utilización de los medios públicos a disposición en la ciudad. “No se puede concebir que se tuviera que incinerar a fallecidos madrileños a cientos de kilómetros, en Brugos o Ponferrada”.
En este sentido, el presidente del Comité de Empresa, Manuel Carmona, ha instado al Gobierno municipal a instalar dos nuevos hornos crematorios en el Tanatorio Sur, cuya preinstalación “ya está hecha”. Por su parte, Ramos ha reprochado que “no se termine de decidir” el establecimiento de estos hornos “cuando a las empresas privadas sí se le ha permitido la creación de otros ocho”.