Cuatro de cada diez españoles creen que ha conseguido su trabajo por enchufe. Si un amigo o familiar está capacitado para el puesto, ¿es justo colocarlo en su empresa?
España se ha convertido en un país dónde el enchufe es cada vez más necesario para conseguir un puesto de trabajo, incluso para hacer negocios.
Los contactos más utilizados para conseguir un trabajo son los familiares directos. De hecho, según un estudio elaborado por el CSIC, uno de cada cinco trabajos procede de la mediación de los propios familiares.
La polémica respecto a esta cuestión siempre está a la orden del día: ¿Se puede colocar a un amigo o familiar cualificado para el puesto en la empresa? Muchos coinciden en que debería pasa las mismas entrevistas que el resto de los candidatos y ser evaluado como tal.
Lo cierto es que, nunca viene mal recibir una ayuda y seguro que la mayoría conocen a una persona que ha entrado en su trabajo a través de algún contacto.
